Isabel Rangel Barón: No quitarse las lentillas para dormir y otros errores que se pueden evitar
El astigmatismo, hipermetropía y la miopía son los errores de refracción más comunes. Para muchos las lentillas son una herramienta indispensable para solucionar estas discapacidades visuales. Sin embargo, todo puede ser en vano cuando conscientemente decides no cumplir con las indicaciones de su uso.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, 153 millones de personas sufren problemas ópticos. Y se espera que los casos por miopía aumenten un 50% para el 2050, según una investigación de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Sidney.
Comprar lentillas es la opción ideal para evitar operaciones y andar con gafas en todo momento. Es una decisión bastante sencilla que no supone grandes riesgos ni complicaciones.
Errores más frecuentes con las lentes de contacto
Son muchos los errores que se cometen a diario y que en un futuro pueden desembocar en infecciones y otros malestares.
Te los presentamos a continuación, de manera que los evites y te asegures de tener una salud visual estable.
Dormir con las lentillas puestas
Hacer la siesta o dormir en la noche con las lentillas puestas es uno de los errores más frecuentes. Los especialistas aseguran que esta medida acarrea riesgos de desarrollar queratitis o inflamación corneal.
De hecho, no recomiendan usar ni siquiera las lentillas que, según su fabricación, sí están destinadas a usarse en esos momentos de descanso.
Alargar la vida útil de los lentes de contacto
Son muchos los usuarios que no entienden que es necesario deshacerse de las lentillas cuando ya han cumplido su tiempo de vida útil.
Guardarlas por un tiempo mayor al estipulado te impedirá tener una visión adecuada. Los fabricantes de estas herramientas visuales recomiendan un tiempo idóneo de duración.
Si ese periodo es transgredido, ocasionará riesgos oculares a mediano y largo plazo. Las lentillas perderán sus propiedades. Por esto, si llevas mucho tiempo con ellas, no dudes en cambiarlas.
Guardar las lentillas sin el líquido correspondiente
Mantener las lentillas en buen estado depende, en gran medida, de preservarlas con la solución única que viene con el producto.
Guardar los lentes de contacto sin este producto, o conservarlos sin agua y sal, incrementa el riesgo de sufrir infecciones oculares.
Recuerda que en el agua hay cientos de bacterias que luego van a estar en contacto directo con tus ojos. Además, esa combinación solo te ayudará a conservar las lentillas, pero no ha desinfectarlas.
La jefa del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario de Móstoles, Mar González Manrique, recomienda que en caso de no tener el líquido correspondiente, las preserves en agua; previamente hervida y enfriada, con una cucharada de sal o en suero fisiológico.
Ahora bien, indica que es importante que encuentres en el menor tiempo posible la solución adecuada.
Decirles no a las lágrimas artificiales
Usar lentes de contacto implica, en ciertos casos, pasar muchas horas del día con resequedad ocular. Para combatir esta afección las lágrimas artificiales son de gran ayuda.
Sobre ellas existen muchos mitos, pero la verdad es que son un tipo de colirio que imita la lágrima natural.
En ese sentido, la reducción del parpadeo, propia del uso de los lentes de contacto, no significará malestares profundos.
Recuerda que así como tienes la opción de comprar las lentillas a domicilio, también existen farmacias que te hacen llegar estos líquidos. Aprovecha la oportunidad y evita la sequedad ocular.
Despertar y colocarse las lentillas
Los especialistas del Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas de España señalaron que cuando apenas abres los ojos, estos órganos no alcanzan las condiciones basales óptimas para colocar un instrumento invasivo, como lo son las lentillas.
Es necesario que te des el tiempo adecuado para generar el estado fisiológico normal que le permita al cuerpo aceptar este tipo de herramientas visuales. Por esto, después de despertar ve y dúchate, vístete para el día, desayuna, y después ponte tus lentillas.
Guardar las lentillas después de una conjuntivitis
Volver a usar los lentes de contactos después de haber padecido una conjuntivitis es un error fatal. No hay manual o especialista que indique que guardarlas después de un estado de infección como este sea lo correcto o esté permitido.
La razón en obvia: las bacterias que se adhieren al lente de contacto permanecen allí durante mucho tiempo, aunque los desinfectes. Y cuando los vuelvas a usar, seguramente te contagiarás de nuevo.
Si las lentillas no son desechables es primordial que las desinfectes con soluciones profesionales, no con el líquido de uso diario. Incluso, puede llegar el caso de que el oftalmólogo recete un cultivo específico para determinar, con precisión, cuál es el patógeno o bacteria que produjo la infección.
La entrada No quitarse las lentillas para dormir y otros errores que se pueden evitar aparece primero en Blog de Salud y Bienestar | Cuídate con Salud.
Ver Fuente