Isabel Rangel Barón: 10 ventajas de usar lentes de contacto que quizás no conozcas
Cada vez hay más personas diagnosticadas de algún problema de visión, que tienen que recurrir al uso de gafas para poder ver correctamente. Estudiantes que fuerzan mucho la vista de cerca, personas que trabajan todo el día delante del ordenador, e incluso alguna predisposición genética que viene marcada desde el nacimiento y que impide que veamos correctamente. En todos los casos, hay una alternativa al uso de las gafas: las lentes de contacto.
Y es que gracias a las lentes de contacto, las limitaciones de muchas personas que llevan gafas son mucho menores. Tienen una serie de ventajas a la hora de hacer todo tipo de actividades, e incluso para usar todo el día o en momento puntuales. Si te estás planteando dar el paso y comenzar a usar lentillas, es el momento de que conozcas los beneficios que estas pequeñas lentes ofrecen a quienes las llevan.
Te contamos cuáles son las ventajas de usar lentillas hoy en día, ya que los modelos que podemos encontrar en el mercado son muchísimo más avanzado, cómodos, y aptos para todas las necesidades. Sea cuál sea el motivo por el que quieras dejar de usar gafas, seguro que cuando recurras a tus primeras lentillas de prueba, no querrás dejar de usarlas.
Ventajas de las lentes de contacto
Mayor campo visual
Las lentillas son una pequeñas y finas lentes, totalmente flexibles, que se introducen en el ojo y quedan adheridas en el sitio correcto. Gracias a esto, conseguimos un campo visual completo, algo que no aportan unas gafas, en las que suelen quedar puntos ciegos cuando no miramos al frente.
Las lentillas se mueven cuando movemos el ojo, de forma que no se producen distorsiones cuando no miramos en la zona central. Es mucho más cómodo usar por ejemplo lentillas para conducir o para practicar cualquier deporte, en esos momentos en que tenemos que tener la vista fija al frente, pero también fijarnos en otros detalles a nuestro alrededor.
Si estás pensando en comprar lentillas, siempre puedes hacer una primera prueba para ver qué tal te va con ellas.
Percepción a tamaño real
Otro fallo que tiene el uso de gafas, y que no ocurre con las lentillas, es que al distorsionarse la imagen, no siempre percibimos los objetos a su tamaño real. Según el tipo de corrección visual que tenga el paciente, puede ver los objetos más grandes o más pequeños de lo normal.
Esta distorsión también se puede apreciar desde fuera. Seguro que si eres miope, al mirarte en el espejo con las gafas ves tus ojos más pequeños de lo normal, siendo más grandes si usas gafas para la hipermetropía. Sea cuál sea tu problema de visión, hay muchos tipos de lentillas disponibles para ti, desde las más sencillas, hasta lentillas tóricas para la corrección de problemas como el astigmatismo. Con las lentillas podrás evitar estos problemas, con una mejor imagen de ti mismo.
Visión cómoda
Hoy en día las lentillas están fabricadas con materiales que las hacen súper cómodas de llevar. Con un mayor contenido en agua, alta flexibilidad, y una porosidad mayor para que el ojo pueda ‘respirar’, son tan cómodas que es como si no llevaras nada.
Una vez que te acostumbras a ellas, te olvidas de que las llevas puestas, manteniéndose tu ojo bien hidratado, sin riesgo a que se muevan, ni que te hagan daño.
Protección ocular
En aquellas personas que tengan algún tipo de erosión o herida en la córnea, las lentillas actúan como un protector. Sobre todo las lentillas nuevas que son tan naturales, que es como si pasaran a formar parte de nuestro propio ojo.
En estos casos, para evitar mayores daños, los profesionales recomiendan el uso de lentillas diarias o lentillas terapéuticas especiales. Así no tenemos que recurrir a otros procedimientos más agresivos para tratar estas ulceraciones en el ojo.
No se empañan
Si llevas gafas frecuentemente, sabrás lo molestas que son cuando está lloviendo, o cuando estás en alguna situación de elevada humedad o alta temperatura. Las gafas tienden a empañarse, o el cristal se moja con frecuencia, teniendo que estar constantemente limpiándolas para poder ver bien.
Esto no ocurre con las lentillas, ya que aportan siempre una visión total, como si fueran parte del mismo ojo, siendo mucho más cómodas por ejemplo para trabajar en la cocina, para viajar a países húmedos, o incluso para salir de casa en un día de lluvia.
Sensación de libertad
Las lentes de contacto en general nos aportan una mayor sensación de libertad. No pesan, no estorban, no se resbalan, no botan cuando nos movemos, no rozan en la nariz o detrás de las orejas, ni corres el riesgo de que se te caigan o se pierdan, como ocurre con las gafas.
Una vez que te pones las lentillas, no tienes que preocuparte de nada, porque quedan bien sujetas en tu ojo, sin moverse y sin molestarte.
Aspecto natural
¿Tienes algún evento en el que te vas a vestir de gala o las gafas no encajan con tu look? ¿Te gustaría lucir un maquillaje llamativo, pero el armazón de las gafas lo tapa por completo? O si simplemente eres coqueto y prefieres que unas gafas no estén cubriendo tu rostro, llevar lentes de contacto es como si no llevaras nada.
Son perfectas también para llevar con cualquiera de tus gafas de sol no graduadas, sin tener que estar cambiándote constantemente de gafas.
Permiten hacer deporte
Los deportistas que tienen algún tipo de problema de visión, ven la mejor solución en el uso de las lentes de contacto. Son perfectas para hacer cualquier tipo de actividad física, en el gimnasio o al aire libre, con una mejor visión y sin molestias.
La mayoría de deportes no se pueden poner en práctica con unas gafas de vista, y siempre es necesario ver correctamente para poder hacerlo. Como ya dijimos, el campo de visión es mejor con un buen par de lentillas, controlando todos los flancos para que no se te escape ni una.
Se pueden usar en la piscina
Los deportes en los que es más necesario el uso de lentillas, son los acuáticos. Bajo el agua no podemos llevar gafas graduadas, pero sí unas lentes de contacto adecuadas para poder ver bien.
Puedes comprar lentillas específicas para el uso acuático, o bien usar tus lentillas normales con unas gafas de buceo. Recuerda que no todas las lentillas te permiten abrir los ojos bajo el agua, pero si tan solo vas a pasar un rato de relax en la piscina o en la playa, tus lentillas habituales son más que suficiente.
Para todas las edades
Si bien los primeros modelos de lentillas que salieron al mercado hace algunas décadas eran de lo más rudimentarias, hoy en día han sufrido infinidad de avances que las hacen aptas para la corrección de problemas de visión de todo tipo y en personas de todas las edades.
Las lentillas se pueden adaptar a partir de niños de 8 años, y a medida que vamos creciendo, que los problemas de visión cambian, también son aptas para corregir la presbicia en los mayores.
La gran noticia, es que sea cuál sea el tipo de lentillas que necesites, seguro que en tu óptica online las encontrarás a muy buen precio y con excelentes opiniones.
La compra de lentillas online ha aumentado tanto en los últimos años gracias a la excelente relación calidad precio que encontramos en las mejores webs, que tienen a la venta las mejores marcas del mercado con un descuento mucho mayor que en las ópticas de toda la vida.
Encuentra tus lentes de contacto, y ya verás como la vida se ve mucho mejor cuando llevas lentillas.
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